martes, 26 de marzo de 2013

Frío y/o calor, pero cuánto tiempo

No basta con colocarse una compresa fría o caliente sobre la piel y olvidarnos de que la tenemos puesta, ya que es de una notable importancia la correcta aplicación de los distintos medios crioterápicos y termoterápicos.

Con la crioterapia o terapia por el frío perseguimos provocar vasoconstricción en la zona afectada, disminución del dolor (efecto antiálgico), así como disminución del espasmo muscular. Ahora bien, si alargamos el tiempo de exposición al frío, más de 15 minutos, se provocará una vasodilatación en la zona afectada, produciéndose un aumento de los síntomas inflamatorios.
Lo ideal en la crioterapia es la aplicación del gel frío o del hielo durante 10 -15 minutos repitiéndola cada 2 horas, o bien un máximo de 3 periodos de 8 minutos con un reposo de 2 minutos entre periodos, que da excelentes resultados.
Durante la aplicación de las compresas (bolsas de criogel o hielo) hemos de tener mucho cuidado con las quemaduras, para lo que deberemos interponer una tela liviana y comprobar cada 2-3 minutos el aspecto de la piel; si se produjera sensación de quemazón, se deberá retirar inmediatamente.

Con la termoterapia o terapia por el calorperseguimos justamente lo contrario, la vasodilatación de la zona afectada, analgesia, efecto antiinflamatorio, disminución de la rigidez articular, así como efecto antiespasmódico. La aplicación de la termoterapia ha de ser durante un máximo de 20-30 minutosseguidos, descansando posteriormente un par de horas, y pudiendo repetir el proceso las veces que sea necesario. No dormir nunca con la manta eléctrica puesta, ya que provocará justamente los efectos contrarios a los que perseguimos.
El calor más eficaz es el que procede de lámparas infrarrojas (llega hasta la capa muscular que es donde hace efecto). Pero la fórmula de aplicación más extendida es la manta eléctrica o las bolsas de agua caliente, que aunque menos eficaces, suelen dar una sensación temporal de calma, aunque hay que tener mucho cuidado, puesto que su efecto analgésico nos puede llevar a sufrir quemaduras en la piel en caso de temperaturas elevadas.

La otra posibilidad de tratamiento mediante frío y/o calor es la inmersión, que ya expusimos en el post anteriormente mencionado ("Frío o calor, qué usar en cada caso"):
"En los procesos subagudos y en lesiones en pies o manos, suele ser muy usados los llamados baños de contraste, donde se alterna el uso del calor y del frío. Existe multitud de protocolos, pero el que me ha funcionado durante mis 15 años de experiencia profesional como fisioterapeuta es el siguiente: (tabla de tiempos)
 
SUBAGUDO/AGUDO*
SUBAGUDO/CRÓNICO**
Frío (1 min.)
Calor (2 min.)
Calor (2 min.)
Frío (1 min.)
Frío (1 min.)
Calor (2 min.)
Calor (2 min.)
Frío (1 min.)
Frío (1 min.)
Calor (2 min.)
Calor (2 min.)
Frío (1 min.)
Frío (1 min.)
Calor (2 min.)
Calor (2 min.)
Frío (1 min.)
Frío (1 min.)
Calor (2 min.)
* Cuando pasadas las primeras 48 h. persisten la mayor parte de los síntomas agudos.
** Cuando persiste el edema y han cedido la mayoría de los síntomas.

La temperatura del agua es muy importante, así los baños calientes se realizarán con una temperatura constante entre 38-40º y los baños fríos entre 10-15º."

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